Clima Patrimonio de la Humanidad

El patrón de funcionamiento relativamente estable del Sistema Terrestre que emergió en el Holoceno, como patrimonio común intangible de la Humanidad

Resumen

En 2021, la Ley del Clima portuguesa consagró en su art. 15, f), el objetivo de reconocer el Clima Estable como Patrimonio Común de la Humanidad con las Naciones Unidas. Este objetivo innovador convirtió a Portugal en el primer país del mundo en conocer evidencias científicas consolidadas y reconocer que el Planeta Tierra no es sólo un territorio de 510 millones de km2, sino que está esencialmente dotado de un sistema funcional capaz de proporcionar un clima relativamente estable, permitiendo por las condiciones biofísicas favorables al florecimiento de las civilizaciones humanas, como ha ocurrido durante los 11.700 años de la época del Holoceno. La necesidad de distinguir el “Territorio Estático” del “Sistema Funcional” fue identificada posteriormente en el último informe de la Comisión de Derecho Internacional (CDI) de las Naciones Unidas para el período 2021-2029, que señala: “La atmósfera y el espacio aéreo son dos conceptos que es necesario distinguir. (...) La atmósfera, como "envoltura de gases" que rodea la Tierra, es dinámica y fluctuante, con gases en constante movimiento, sin tener en cuenta límites territoriales. (...) La atmósfera es invisible, intangible e inseparable”, asumiendo la distinción entre el “aspecto funcional” y la “institución estática y espacial sobre la cual el Estado, en su territorio, tiene soberanía total y exclusiva”. Por un razonamiento análogo, debería hacerse la misma distinción entre, por una parte, la composición bioquímica del agua de mar y la circulación global de los océanos y, por otra, los espacios marítimos bajo la soberanía o jurisdicción de los Estados. Esta distinción, entre el “sistema funcional común” y el territorio estático soberano, tiene profundas implicaciones en la forma en que combatimos el cambio climático, aseguramos la preservación de la biodiversidad y organizamos las sociedades humanas en su relación con el planeta que habitamos y del que dependemos.